Escribí tus amores, tus dolores, tus deseos, tus temores.
Poesía

 

Instantánea en el tren 

Un flechazo en el tren

Una sonrisa esquiva

Luego una pregunta

Y un inmiscuirse adecuado

Los ojos sostenidos sin quitar la mirada

La sonrisa ampliaba

El corazón inflamaba.

En bicicleta venía el hombre

Al igual que la dama

Lo igual cura lo igual

Aunque no hay nada que curar

Todo es como debe ser

Según la biodescodificación.

Quedarse tranquilos ante la gran sabiduría

Entonces sonreírse en el tren está bien

¿Se encontrarán algún día otra vez por azar

O hará su jugarreta la sincronicidad?

Pues ni tarjeta el caballero le ha dado

Ni de la cartera de la dama ha salido

Dios quiera que el sino o el viento los una

para biodescodificar su camino.

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